EL UNIVERSO
Manuel Toro | ESMERALDAS
Los perros amaestrados que llevó la Policía al canal El Viento, lugar donde fue encontrado el pasado viernes un submarino, detectaron restos de droga en el lugar, lo que confirma que en el sitio sí hubo estupefacientes, pero aún no han sido encontrados por las autoridades, lo que hace suponer que fue evacuada y trasladada a otro punto, presumiblemente en Colombia.
El difícil traslado de la embarcación causa problemas a las autoridades, por lo que aún permanece en el mismo lugar donde fue encontrada.
Joel Loaiza, director nacional Antinarcóticos de la Policía, confirmó ayer a AFP que en la denominada operación ‘Tormenta del Manglar’, que permitió la localización del submarino, colaboró con información la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA).
Por las versiones del único detenido se conoce que el narcosubmarino aún no había realizado viajes y que estaba muy próximo a realizar su primera travesía hacia México.
A pocos metros del lugar se encontraron seis edificaciones. Tres de ellas eran destinadas a talleres para la construcción del sumergible.
La Policía maneja la hipótesis de que el submarino se lo construyó en el mismo lugar donde se halló y que se contó con la ayuda y asesoramiento de expertos colombianos con financiamiento de algún cartel de drogas de ese país.
Solamente la embarcación está avaluada en 4 millones de dólares. En las edificaciones, construidas con madera, se encontraron camas, cocinas, congeladores, 5 plantas de energía eléctrica, equipos para soldadura, tanques de plástico y hasta folletos con diferentes modelos de embarcaciones marinas, especialmente lanchas rápidas y submarinos. El navío tenía su propio sistema de aire acondicionado y podía transportar entre 7 y 10 toneladas de droga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario