miércoles, 2 de febrero de 2011

Bus de Trans Esmeraldas se accidentó en Wínchele

Un gran susto se llevaron los casi 40 pasajeros que la madrugada de ayer martes viajaban en el bus de Trans Esmeraldas disco No. 27, de placas EAG-280, que se volcó en el sector de Wínchele, en la carretera San Mateo-Esmeraldas.
Además del mal momento que vivieron los viajeros, resultaron con golpes leves en diferentes partes del cuerpo, pues, el micro se volcó a un costado de la vía, causando pánico entre los usuarios que en su mayoría iban dormidos.
Se presume que el conductor se habría quedado dormido y perdió el control del automotor, lo que provocó el percance que afortunadamente no dejó saldos lamentables.
Chofer escapó
El carro cubría la ruta Quito-Santo Domingo de los Tsáchilas- Esmeraldas. El accidente ocurrió aproximadamente a las 04:30 de ayer, a unos 500 metros antes de llegar a la gasolinera ubicada en Wínchele.
El conductor y el controlador aprovechando la confusión de los pasajeros escaparon del lugar sin importarles la situación de salud de los pasajeros, quienes reprocharon la acción y cuestionaron la irresponsabilidad del chofer.
Las personas para salir del carro tuvieron que romper el parabrisas delantero y otros lo hicieron por las ventanas. Miembros de la Policía Nacional llegaron al sitio y tomaron procedimiento del hecho, trasladando el bus hasta el patio de retención vehicular de la Jefatura de Tránsito de Esmeraldas.

1 comentario:

Jorge Nicolalde dijo...

Eso de que los choferes huyan dejando a las víctimas a su suerte ya no es cosa nueva, es el común denominador en este tipo de incidentes.
Lamentablemente tendremos que seguir soportando esto, hasta que algún día existan verdaderas autoridades o leyes que persigan y castiguen a estos irresponsables.
La policía puede muy bien averiguar quién es el chofer y la cooperativa está en la obligación de dar el nombre, pero ya sabemos todos que es lo que sucede cuando un ciudadano común comete una falla le caen con todo, pero cuando son delincuentes o en este caso los choferes, nunca se sabe su paradero.