La Secretaria de Gestión de Riesgos, María del Pilar Cornejo, anunció el pasado martes el inicio de los trabajos de estabilización del cerro El gatazo, cuya ladera amenaza a cientos de viviendas ubicadas en la parte baja de este cerro que presenta graves fallas desde hace 3 años atrás.
Desde que se produjo este anuncio, las lluvias no han dado tregua y las labores en el cerro se tornan peligrosas, según advirtió el Jefe del Cuerpo de Bomberos, José Vivero, quien además habita en el sector y en el pasado invierno fue uno de los afectados cuando toneladas de tierra anegaron su vivienda.
Vivero dice que trabajar bajo estas condiciones es altamente arriesgado, por cuanto las lluvias son impredecibles en su magnitud. “Como jefe del Cuerpo de Bomberos y como estudiante de Gestión de Riesgos, considero que no se puede poner en riesgo la vida de personas realizando trabajos en el lugar con estas condiciones climáticas”, dice, refiriéndose a las lluvias que caen sobre la ciudad de Esmeraldas.
El pasado 26 de febrero, el propio Presidente de la República, Rafael Correa anunció la intervención del gobierno en el cerro El Gatazo, que ya cobró 4 vidas y que obligó a la evacuación de casi 100 familias. Una parte de los evacuados recibieron una vivienda gratuita de parte del MIDUVI, en una urbanización construida en el kilómetro 10 de la vía a Atacames, sector denominado Mi Casa Bonita.
Diez meses después de este anunció se empiezan con los trabajos que coincide con la nueva temporada de lluvias. El Gobernador de Esmeraldas, Lenin Lara, dice que desde que se dio el anuncio del Presidente de la República se empezó a presionar para que se inicien los trabajos pero hubo retrasos en la entrega de los dineros.
En el barrio La Cocoi, en el sitio conocido como 3 de mayo, donde murieron 3 personas, los habitantes del lugar dicen sentirse aliviados con el anunció de que se va a intervenir el cerro. “Cristhian Molina, presidente del barrio dice que todo hace presumir que la obra se hará realidad.
En el barrio La Guacharaca, ubicado en la parte baja del cerro, se iniciaron los trabajos de limpieza del colector, según explicó uno de los encargados del trabajo. “Estamos haciendo una evaluación de cómo está en la actualidad el sistema de alcantarillado”, dijo.
En el sector, la mayoría de los habitantes no saben cuáles son los trabajos que se van a realizar. José Vivero, pese a ser el Jefe del Cuerpo de Bomberos y habitante del sector tampoco sabe detalles sobre la realización de la obra. “El contratista tiene que explicar qué mismo es lo que van a hacer no sabemos a ciencia cierta qué tipo de trabajos se van a realizar”, dijo.
Tanto el gobernador Lenin Lara, como el Jefe de los Bomberos y en la Secretaría de Gestión de Riesgos de Esmeraldas, se indicó que el fiscalizador de la obra informará sobre los detalles de lo que se va a hacer. Aunque, extraoficialmente se supo, que se colocaría tela impermeabilizante en el cerro para evitar que siga saturándose de agua y se construirán 2 nuevos colectores.
Corina Castillo, dice que a los habitantes del barrio no les han dicho qué mismo es lo que piensan hacer. Pese a que ella fue afectada en el pasado invierno por el flujo de barro y piedras que bajó del cerro, asegura que no piensa evacuar.
La parte de la ladera próxima al cerro, donde anteriormente se asentaba el barrio Unión y Progreso, ha sido desalojada y luce ahora como un barrio fantasma. La mayoría de los evacuados se fueran a las casas que entregó el MIDUVI, pero hay otros que aún tienen esperanzas de regresar al sector.
El cerro El Gatazo no solo afectó a los habitantes de Unión y Progreso, los deslizamientos ocurridos a inicios de este año, llevaron flujo de piedras y lodo hasta la calle Colón, canalizada a través de la calle Méjico, casi 12 cuadras más abajo, afectado a barrios distantes como la Guacharaca, Méjico, 20 de Noviembre y otros.
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