EL UNIVERSO
Un grupo de trabajadores inició el pasado martes una medida de hecho en las afueras de la Refinería Estatal de Esmeraldas.
Los trabajadores estaban ayer en carpas protestando –según indicaron– por retrasos tanto en el proyecto de rehabilitación de la planta y en el pago de bonificaciones.
Miller Quiñónez, dirigente de los trabajadores, dijo que hasta el momento no se ven avances físicos ni técnicos en la rehabilitación de la planta, pese a que se entregaron 56 millones de dólares a la compañía coreana SK, encargada de esas labores.
Añadió que “se cometieron errores al no contratar primero la ingeniería básica y de detalle, que es la que va a determinar la calidad de equipos, repuestos y materiales que se van a usar en la rehabilitación”.
Además, denunció que la planta trabaja bajo condiciones de inseguridad, lo que expone a los trabajadores y a los habitantes a un potencial peligro que no ha sido tomado con responsabilidad por la administradora, la Armada Nacional.
Citó el caso de hace dos semanas, cuando dos trabajadores resultaron quemados por un daño en las instalaciones.
Agregó que se trata de una medida de carácter indefinida y que los trabajadores de esta planta permanecerán en las carpas hasta que sean escuchados. Otros trabajadores, en cambio, indicaron que la medida obedece a que no se cumple con el pago de reliquidación de horas extras.
Petroleras: Inconvenientes
Parches
La planta de FCC de la refinería, que es el lugar donde se producen las gasolinas y el gas de uso doméstico, está trabajando con parches, lo que es antitécnico, dijeron los manifestantes.
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